Human Touch forma parte del álbum homónimo lanzado al mercado en 1992 junto con Lucky Town. Desde siempre, ambos discos, (sobre todo Human Touch) se han considerado una obra menor de Bruce. Algo que yo no comparto. Quizás haya una descompensación entre canciones “blandas” y “duras” a favor de las primeras, pero esto quizás revitalizó la búsqueda constante de nuevas formas, de algún modo se le puede considerar una renovación, un principio. Y veces los principios no son fáciles, tienen un precio: Bruce prescindió su famosa banda, la E Street Band, y un premio: se sucedieron los nacimientos de sus dos primeros hijos (Evan y Jessica) con su esposa Scialfa. El cantante intentó plasmar su felicidad, su vida familiar en las catorces canciones del disco, una de ellas es la que presentamos hoy, un tema que nos habla del amor y las ciudades grises repletas de extraños. Dedicada a los que buscan, en vez de conexión a Internet en los bares,conexiones humanas.
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